Historia de Santa Fé
El primer asentamiento europeo data de 1527, en la unión de los ríos Paraná y Carcarañá. Sebastián Gaboto erigió el fuerte de Sancti Spiritu, que luego fue destruido por los pueblos originarios como rechazo a la colonización.
En noviembre de 1573, Juan de Garay fundó la ciudad de Santa Fe, en las barrancas del río de los Quiloazas, actualmente río San Javier. De este modo, Garay fue el primer teniente de gobernador de Santa Fe y el territorio se instituyó como Tenencia de Gobierno de Santa Fe. Debido a las reiteradas inundaciones, la ciudad se trasladó a su actual lugar.
Creado el Virreinato del Río de la Plata, en 1776, y con el dictado de la Real Ordenanza de Intendentes, Santa Fe quedó comprendida dentro de la Gobernación Intendencia de Buenos Aires, como una tenencia de gobierno.
Después de la Revolución del 25 de mayo de 1810, esta provincia continuó dependiendo de Buenos Aires hasta que en 1815 designó su propio gobernador, Francisco Candioti.
Estanislao López, en 1819, proclamó la soberanía de la provincia y dictó la primera constitución de Santa Fe.
A la muerte de López, en 1831, se produjeron en Santa Fe luchas internas entre sectores unitarios y federales.
En 1851 fue invadida por el Ejército Grande de Justo José de Urquiza y dos años después, durante el mandato de Juan Pablo López, adoptó una nueva Constitución Nacional.
Luego de la Organización Nacional, la provincia vivió una era de paz, solo alterada por fuertes contiendas electorales entre las dos corrientes políticas: la federal, seguidora de Urquiza, y la nacional o liberal, seguidora de Bartolomé Mitre.